viernes, 18 de noviembre de 2005

Gran Hermano

No voy a hablar del popular programa de Televisión, ni voy a desatar polémicas en torno a los concursantes o al mismo programa. No, el Gran Hermano ha existido desde hace muchos años, y los concursantes somos nosotros. En este juego no competimos a cual es más estúpido (aunque reconozco que con el paso de los siglos, el hombre alcanza nuevos niveles de estupidez (ya lo decía Einstein: "sólo hay dos cosas que son infinitas: el Universo y la estupidez humana. De la primera creo que tengo dudas")). En este juego no nominamos a nadie ni nadie es expulsado. En este juego estamos vigilados y saben cada una de nuestras acciones.

Me asusta pensar qué no se sabe sobre nosotros. Si hasta empresas que no conocemos ni hemos tenido contacto con ellas, tienen todos nuestros datos personales (nombre, apellidos, dirección, fecha de nacimiento, teléfonos, correo electrónico...), e incluso tienen un estudio exhaustivo (que ni siquiera hubiésemos llegado a imaginar) de nuestras preferencias en las compras: tipo, modelo, marca, color, tamaño, forma, etc.

Si ya nos asusta estos datos que sobre nosotros formulan las empresas, ¿qué no nos asustaría otras entidades gubernamentales y no gubernamentales, en materia de Seguridad Nacional y otras agencias en teoría no existentes?. Parece que hablo de una novela de Dan Brown (el autor de "El Código DaVinci", "Ángeles y Demonios", "La conspiración"), de Frederick Forsyth, Ken Follet o John LeCarré. ¿Dónde llega la realidad y dónde la ficción?.

Ha sido demostrado que después de la Segunda Guerra Mundial, el gobierno de USA ha creado agencias encubiertas y públicas (léase CIA, FBI, DEA, NSA, etc.) con el fin de combatir el mal en el mundo. Ya sabemos que nuestros amigos yankis desconfían del vecino, y por eso llevan armas para defenderse (aunque en casi todo el mundo podemos ir por ahí sin armas y no nos pasa nada).

Curiosamente hace ya muchos años se creó un centro de investigación de llamadas telefónicas y correos llamada Echelon. Este fue el prototipo de "Gran Hermano" que USA creó para investigar a cualquier sospechoso de asesinato, de terrorismo, de conspiración, etc.

Cualquiera podría pensar que me estoy inventando esto, o que incluso me hago eco de rumores o de leyendas urbanas. Pero no es así.

Sabemos que USA ha enviado multitud de satélites para vigilar desde el cielo cualquiera de nuestros movimientos, para interceptar llamadas de teléfono y otra multitud de cosas que nos daría escalofríos en la nuca.

Curiosamente, podemos corroborar la "eficacia" de Echelon con relación al 11S. Se montó un buen revuelo por haber dejado "escapar" todas las conversaciones y los movimientos de los supuestos terroristas del 11S, así como de toda la organizacion AlQaeda en general. Fue un bochorno mayúsculo, ya que se demostró que Echelon estaba anticuado, y era necesario invertir en un "Gran Hermano" más poderoso. En realidad dijeron esto para no pasar la vergüenza (que al final la tuvieron que pasar), de que todo fue captado, pero que no había traductores del árabe. Ya de paso conseguían las subvenciones y los poderes necesarios de crear un Gran Hermano más poderoso.

Otra prueba de la eficacia de Echelon y de sus tentáculos, fue la detención y el espionaje de muchas personas inocentes, a través llamadas telefónicas, correos electrónicos, blogs, páginas y contenidos en general, en los que aparecieran palabras tales como "Bin Laden", "AlQaeda", "terrorismo islámico", etc... (seguro que después de escribir este párrafo tengo a los de la CIA deteniéndome, torturándome e interrogándome. A lo mejor termino en Guantánamo).

Os preguntaréis a qué viene toda esta reflexión. Pues bien, se debe a que ayer fue noticia que USA ha sido autorizado a tener el control absoluto de Internet. Si antes lo hacían de manera ilegal, ahora tienen el derecho y la legalidad de hacerlo impunemente. Miedo me da.

Otra de las razones de esta reflexión está basada en la impunidad de algunas empresas de espiar al usuario. Entre ellas destaca la reciente polémica de Sony, al introducir un rootkit en sus discos compactos de música. Con este rootkit, si intentas utilizar el disco en tu ordenador (aunque sólo sea para escuchar la música), se autoinstalará un programa en el ordenador que te espiará y le remitirá a Sony el uso que haces de sus discos. Este tipo de programas (llamados spyware) son ilegales. Lo mejor de todo es que se instalan sin que te des cuenta. Gracias a un "gurú", esta acción fue detectada y puso el grito en el aire, alertando a todo el mundo gracias a esta maravillosa Internet. Como podéis imaginar, los ecos de rabia y de furia saltaron enseguida en todos los lugares de nuestro amado planeta. En un principio, Sony, se hacía el "longui" (el despistado, el "no lo sabía") , preguntando incluso que qué era eso del rootkit. Más tarde, ante la evidencia, admitió esta actividad y sus disculpas intentando quitar polémica anunciando su retirada en el futuro. Pero ayer, cambiaron nuevamente su postura, y además en plan muy chulo y prepotente, alegando que "nos reservamos el derecho a instalar spyware en su PC". Asimismo, establece una serie de condiciones abusivas e irracionales de los derechos del comprador, que debe aceptar (porque sí, porque yo lo digo) una vez ha comprado el CD de música (casi ni leemos los títulos de las canciones, como para leerse todas estas aburridas cláusulas legales, que aún no sé dónde están (creo que en el interior del CD y en letra muy pequeña, por que si estuvieran en la carátula exterior y con letra bien visible no compraríamos ningún CD). He leído esas cláusulas de obligaciones o imposiciones del comprador, y me parece que son totalmente ilegales y que no existe ley alguna que estime esas obligaciones. Os recomiendo encarecidamente que leáis estas absurdas y abominables cláusulas para que os déis cuenta de la imposición de esta compañía: http://www.diarioti.com/gate/n.php?id=10023

No tenemos privacidad alguna. Hemos perdido el derecho a nuestra intimidad. Cada vez tengo más envidia de los antiguos ermitaños, de los ascetas, de los "sin papeles", de los "sin hogar". No tendrán dinero, ni techo y a veces ni comida, pero por lo menos tienen el control de su vida, y eso se llama libertad.